El niño/adolescente a lo largo de su historia escolar puede presentar dificultades escolares sin que éstas sean causa de trastornos de aprendizaje u otras patologías, propiamente dichas. Puede tener otras explicaciones: falta de motivación, falta de técnicas o hábitos de estudio, dificultades en las relaciones sociales, baja autoestima, adaptación al centro…..